La escena nos pareció tan futurista como irreal: Tom Cruise como agente en una unidad que actuaba con el «precrimen», un delito que todavía no se había cometido, pero que indefectiblemente iba a tener lugar. Esta estampa que todos reconocerán de Minority Report podría ser una realidad más pronto de lo que pensamos, y de hecho, en China se está comenzando a probar un sistema que de alguna manera, predice los delitos antes de que se cometan, y con una gran fiabilidad.

Las autoridades chinas están probando un sistema que se basa en la combinación del reconocimiento facial y la inteligencia artificial como una herramienta casi definitiva contra el crimen. Hasta la fecha, la policía actuaba de manera preventiva haciendo un seguimiento exhaustivo de los sospechosos o bien de forma presencial en aquellos lugares susceptibles de cometerse un delito, pero ¿cómo anticiparse, por ejemplo, a un atentado suicida llevado a cabo por una persona no fichada? Es aquí donde entra en juego este nuevo sistema que está siendo desarrollado por la firma de reconocimiento facial Cloud Walk.

Están probando un sistema que se basa en la combinación del reconocimiento facial y la inteligencia artificial como una herramienta casi definitiva contra el crimen.

El funcionamiento del sistema, que no ha sido todavía reconocido oficialmente, consiste en utilizar las cámaras ubicadas en lugares públicos para obtener imágenes de forma sistemática de los transeúntes para luego analizarlas con un sistema de reconocimiento facial. En esta primera batida no se identificaría a la persona, sino que se analizarían sus facciones. Y es en este punto en el que entra la inteligencia artificial: toda esta cantidad ingente de información sería analizada por un software que cotejaría los datos y alertaría a la policía en caso de un positivo.

Esto sucedería cuando una misma persona, por poner un ejemplo, visitara repetidas veces un lugar habitualmente aglomerado y posteriormente acudiera a una tienda de armas: en este caso, las autoridades entenderían que esta persona tiene altas posibilidades de cometer un atentado y actuarían en consecuencia. Según parece, este software se habría instalado ya en las comisarías de policía de más de cincuenta ciudades del país y estaría ya alimentando una descomunal base de datos de rostros y sus movimientos.

Vía | ElPaís